En mi anterior artículo sobre este tema os informaba de las cuantías de las ayudas por cada tipo de aparato. Hoy os explico quienes pueden beneficiarse de estas ayudas y los requisitos necesarios para obtenerlas.
La gestión de las ayudas y los complementos a la parte que pone el IDAE, del Ministerio de Industria, corresponde a cada Comunidad Autónoma, que dispone de un presupuesto limitado a una cantidad y va otorgando tales ayudas hasta su agotamiento.
Los beneficiarios de las ayudas deben ser, por lo tanto, residentes en la Comunidad que está gestionado el Plan Renove. Deben ser personas físicas y mayores de edad. Para la acreditación de estos requisitos es suficiente, normalmente, con el DNI, pero a veces se requiere un certificado de empadronamiento que justifique que vive en una localidad de la Comunidad en cuestión.
Se requiere también que el beneficiario tenga su residencia habitual en la zona, y que disponga de una cuenta bancaria donde la Administración le pueda enviar la transferencia de la ayuda o subvención.
Si compra varios electrodomésticos, puede recibir la ayuda por cada uno de ellos, siempre que entregue los viejos (menos eficientes) y adquiera los nuevos de la clase energética A o superior.
Estos aparatos no podrá venderlos el beneficiario en el plazo de tres años, y deben ser para su uso exclusivo y personal, e instalados y usados en su domicilio habitual.
La Administración puede retener la ayuda si el beneficiario no está al corriente de todas sus obligaciones tributarias.
Estos son los requisitos y condiciones para poder aprovechar las ayudas del Plan Renove. Anímate y cambia los aparatos menos eficientes por otros más eficientes. Los amortizaran en poco tiempo con el ahorro en electricidad, agua, detergente, etc.
Otro consejo: Si tu electrodoméstico tiene más de 12 años, piensa en cambiarlo aunque todavía funcione bien. Aprovecharás la ayuda y amortizarás su coste muy rápido por los menores costes de funcionamiento diario del aparato.
Es frecuente oír: “mi madre tiene una lavadora desde hace 20 años y le funciona estupendamente”. Pues no. Las actuales consumen la mitad de agua, la mitad de electricidad y de detergentes, tratan la ropa con más cuidado, hacen menos ruido, centrifugan a más velocidad y lavan mucho mejor.
Idénticas argumentaciones son válidas para los frigoríficos, lavavajillas, secadoras, aire acondicionado, hornos, encimeras, etc.
Solo hay una excepción, la calefacción eléctrica. Siempre te consumirá lo mismo a igualdad de potencia del aparato. Ni calores azules, ni alto rendimiento, ni bajo consumo, ni historias .