“Oscar Martinez29 de mayo de 2014, 13:00
Buenas tardes, D. Antonio.
Soy un habitual seguidor de su blog y quería agradecerle la de cosas útiles que aprendemos los que por aquí nos acercamos.
El motivo de mi mensaje es a colación de las velocidades de centrifugado de las lavadoras, sobre todo en las antiguas:
Leí en uno de sus artículos que las centrifugadoras de antaño (mal llamadas en la época «secadoras») podían llegar a las ¡2.500-3.000! R.P.M. Lo ignoraba… Siempre pensé que antiguamente, por el motivo que fuese, no se le podía dar más velocidad de centrifugado a las lavadoras automáticas, cosa que hoy día sí por los avances tecnológicos (pienso yo en mi ignorancia). Por eso, aquellas primeras lavadoras automáticas que iban llegando a las casas, como la Indesit L5 de 1977 de mi abuela, llegaba a las 400 RPM, a las 600 en el caso de la Fagor F200 de mi madre, 800…. etc. Las velocidades fueron esas durante años, 380-600 RPM en los 70/80 y 700-900 RPM en los 80/90… y hasta hace relativamente muy poco, llegamos a las 1000-1200 RPM o incluso más (velocidades inútiles pasando de las 1000 como bien nos explicó Vd.) Y después de este rollo ¿a donde quiero llegar? Fácil: No logro comprender cómo no se les ha dotado a las lavadoras con más velocidad de centrifugado durante tantos años, siendo que las centrifugadoras iban sobradísimas. Si queda claro que en aquellas épocas (años 60-70), la velocidad RPM de una centrifugadora podía llegar a esos niveles de velocidad ¿cómo es posible que una lavadora tuviera tan poca velocidad de giro? ¿qué motivos habían para no incrementar esa velocidad durante más de 20 años?
Muchas gracias por su atención, Don Antonio. Un placer.
Oscar”
- rpm a las revoluciones por minuto del motor
- Frecuencia de la corriente, 50 Hertzios (en Europa, en América son 60))
- p será el número de pares de polos del motor.
“Para aclarar mejor este concepto del centrifugado diré que una carga de ropa seca de 5 kilos puede llegar a absorber hasta 10 litros (=kilos) de agua. Conforme se va centrifugando se va eliminando agua (o sea, se va eliminando la humedad residual, llegando, desde el 100 % de partida, hasta un 53 %. Eso significa que al centrifugar hemos eliminado aproximadamente la mitad del agua que había absorbido la ropa. Y a este valor del centrifugado se le da una clase de eficacia de centrifugado del tipo B.”